La primera cosa que hay que tener en cuenta es que la campana extractora tiene diferentes partes y que va a ser conveniente adecentar tanto por la parte interior como por fuera. Es frecuente que las acumulaciones de grasa y suciedad queden en la campana extractora, pero si se marchan dejando, va a ser mucho más bien difícil suprimirlas. Por eso, es importante realizar una limpieza con determinada frecuencia.
Las grasas y los aceites, adjuntado con el polvo y las partículas de suciedad que tienen la posibilidad de adherirse a los filtros metálicos a lo largo de bastante tiempo, se atascan. Otro aspecto importante que juega un papel destacable en la limpieza de la campana extractora son las partes individuales de exactamente la misma. No solo debes adecentar la campana extractora por fuera, sino más bien asimismo las partes internas. En el momento en que limpies tu campana extractora, te sorprenderá ver la proporción de mugre que se ha juntado transcurrido el tiempo.
En seguida observarás la grasa y suciedad que ha acumulado en el tiempo. Y si no quieres que aparezcan machas de cal, recuerda secar bien todas las cacerolas. Ten presente que en España hay zonas en las que el agua corriente es durísima. De ahí que en el momento en que los cacharros se secan tienen la posibilidad de aparecer estas máculas tan incómodas. Una vez terminado, lo aclaramos con agua tibia y lo dejamos secar.
Para un buen mantenimiento de la campana extractora es recomendable limpiarla a diario, de manera superficial, por servirnos de un ejemplo, pasando un trapo húmedo por toda la superficie exterior. Un producto comercial realmente bueno para remover la grasa de las campanas viene a través de KH7, un quitagrasa que puedes conseguir en cualquier autoservicio o droguería. Únicamente debes pulverizar el producto por las paredes internas de la campana, dejar que repose de 10 a 15 minutos y aclarar. Una de las ventajas de los electrodomésticos elaborados con acero inoxidable es que son fáciles de limpiar y de sostener en perfecto estado. Este material se encuentra dentro de los favoritos para la fabricación de utensilios de cocina como sartenes, ollas y asimismo las campanas de extracción. El acero inoxidable es muy fuerte al calor, a las máculas y a la corrosión, especificaciones que lo hacen importante para el día a día de una cocina.
Existen ceras particulares para este material que lo dejarán como nuevo. Solo deberás poner un poco de ese producto en un trapo y pasarlo varias veces hasta que reluzca. Otra opción es rociar tenuemente el trapo con vinagre, limón o alcohol y llevar a cabo la misma operación. Mientras la parrilla está en remojo, rocíe un desengrasante por toda la superficie interior de la campana y déjelo actuar a lo largo de unos minutos. Verás como la mugre se desprende de las paredes del capó en poco tiempo. Si las incrustaciones son mucho más resistentes, es suficiente con repetir la operación.
Adecentar La Campana Extractora Por Fuera
Además, otra opción para lavar los filtros, es hacerlo con el lavavajillas . Para la parte externa, lo destacado es eliminar el polvo y los restos de grasa una vez a la semana, al paso que para la parte interna de la campana basta con intervenir cada un par de meses. Antes de nada, desenchufa la campana y si terminas de utilizarla, espera a que enfríe para ponerte manos a la obra. Hecho esto, únicamente debes pasar el paño humectado con el producto por toda la superficie aparente de la campana siguiendo siempre una misma dirección. Una campana extractora de cocina es un aparato electrodoméstico situado sobre una cocina destinado a la extracción de los humos gracias a su poder de succión. Las huellas digitales son entre las maneras más comunes de suciedad sobre el acero inoxidable.
Un truco muy recomendable, en el momento en que haya restos de comida pegados, es usar un limpiador cremoso. También podrías obtener tú una textura similar mezclando bicarbonato con un poco de agua. A continuación o lo dejas accionar un rato o bien lo frotas levemente con un cepillo de dientes.
Edición En Papel
Emplea siempre y en todo momento un harapo despacio o de microfibras para no rayar la superficie y empeñalo. Limpia el acero inoxidable y sécalo siempre y en todo momento en la dirección del pulimentado a fin de que no queden marcas o ronchas y lograrás un brillo natural. Como hemos comentado en el artículo sobre cómo adecentar tu campana extractora de acero inoxidable, evitaremos el uso de estos materiales ya que pueden estropear el propio acero. Otra duda que seguramente puedes tener es de qué forma se limpia la reja de la campana.
Hazte con un cepillo pequeño y frota a conciencia hasta retirar la mayor proporción de grasa posible. El agua caliente es el mejor amigo para adecentar la grasa de los electrométricos. Déjalos secar a la intemperie o sécalos con papel de cocina antes de volver a colocarlos. Para aclarar los restos del producto de limpieza, utiliza una gamuza de microfibra húmeda y pásala sobre toda la superficie en la misma dirección que antes. Es primordial que sea una bayeta suave y no una esponja o un estropajo, ya que corremos el peligro de rayar la área.
No obstante, si la área está cubierta de grasa o mugre, la reacción química que deja que no se oxide no se genera, y el acero es más vulnerable a la corrosión y al desgaste. Si charlamos de electrodomésticos como el frigorífico o la lavadora, puedes emplear un espray limpiador de cristales habitual y corriente. Después secas con un trapo o papel absorbente y va a quedar impecable. Están por llegar esos días de comilonas familiares y adecentar las campanas extractoras puede transformarse en nuestra peor pesadilla. Cada campana es un planeta, pero afortunadamente cada vez más, en Frecan, apostamos por campanas que nos hacen más simple la labor, merced a su tecnología.
Quita los filtros de la campana extractora y ponlos en remojo con agua tibia y Volvone. No es únicamente una cuestión de higiene y de sanidad, sino también de estética. Porque no hay nada que quede peor que una campana extractora visiblemente grasienta o sucia.
De los mejores consejos es que limpies la campana poco después de cocinar. Así los restos de grasa y suciedad van a ser considerablemente más fáciles de remover que si lo haces unos días después. Por recirculación, en cocinas sin salida de humos, la campana absorbe y limpia el aire haciéndolo pasar primero por un filtro antigrasa. Y después por otro filtro desechable de carbón activo que absorbe los fragancias y devuelve el aire filtrado a la cocina.
Esta se utiliza para evitar que la grasa entre en la campana y se finalice obstruyendo. Por consiguiente, es importante sostenerla limpia y para ello puedes emplear distintos modelos para quitar la grasa y mugre de la reja del extractor. En El Mueble siempre y en todo momento defendemos el uso del bicarbonato de sodio, pues es tiene una efectiva fórmula desinfectante y desengrasante.
Tenemos diversos modelos en distintas formas para que consigas escoger cuál es la mucho más adecuada para tu cocina, si la escoges mucho más grande, más pequeña, integrada o de tipo mural, etcétera. Por todo ello es importante que, una vez instalada en casa, limpies la campana de forma regular. También suprimen la grasa en suspensión en el aire, los productos de la combustión, los olores, el calor, y el vapor del aire que se generan al cocinar. Todo ello a través de una combinación de filtrado con la evacuación del aire. No es únicamente una cuestión de higiene y de sanidad, sino asimismo de estética.
En lo que se refiere al acero inoxidable de la campana, la manera más óptima de limpiarlo es con una bayeta humectada con agua y una pizca de jabón. Entonces pasar la gamuza solo con agua para sacar la suciedad y al final pasar un trapo seco al conjunto. La limpieza de la campana extractora es dependiente de la continuidad de la actividad culinaria. Esto significa que cuanto mucho más uses tu cocina o cocines con grasas, mucho más con frecuencia deberás adecentar la campana de la cocina.